Mourinho como una canción del verano

Decía Joan Manuel Serrat que una canción no es tal hasta  que un ajeno la canta, si lo extrapoláramos al juego del balón podríamos decir que un equipo no es tal hasta que los ajenos a él canten sus goles, es decir, que despierte la admiración de aquellos que no son sus propios incondicionales. Si echáramos una mirada hacía atrás podríamos encontrar varios ejemplos, el Brasil de Pelé, Didi, Vavá, Garrincha, Zagalo..del 1962, el Inter de Mazzola de los 60, la naranja mecánica de Cruyff de 1978, el Milan de Sacchi de final de los 80, el Ajax de Van Gaal de los 90, el Barça de Cruyff, el Madrid de Del Bosque o Valdano etc etc.... todos ellos consiguieron quedar en la memoria de los buenos aficionados del deporte rey, cambiaron formas de entender el juego, innovaron, aportaron y despertaron admiración ayudando a la evolución de tácticas, estrategias y formas de trabajar y entender el fútbol.

El exitoso Mourinho, posee un palmares indiscutible, nunca lo consiguió. Sus equipos no quedarán en la memoria, ni su buen Oporto, ni el Petrochelsea, ni el miserable, rácano, ventajista Inter, ni , de momento, su desaprovechado Madrid. Emperrado en escribir un capítulo en la historia balompédica, parece que su estrategia es más la de despertar rechazo, odio, e infundir miedo allá donde va, como hiciera Torquemada en la , muy nuestra, Santa Inquisición. Posiblemente alcance su propósito y, décadas después, logre entrar el los libros de historia, aunque sea más bien como recordamos a Andoni Goicoechea ( si, aquel que le rompió la pierna a Maradona ) . Así pues parece que más bien Mourinho quedará en canción del verano, rentable si, pero alguien se acuerda de Zapato veloz?..pues eso...